domingo, 17 de febrero de 2008

El antropólogo indecente

¡Oh, soy un mentiroso! ¡Oh, cómo me gusta contar trolas!

Carlos Castaneda, gurú de la Nueva Era




Los paisajes exóticos y las costumbres extrañas hacen que la antropología sea más atractiva al público general que la mayoría de las ciencias. Esto ha permitido que algunos libros de antropología se hayan convertido en auténticos bestsellers. Entre estos grandes éxitos de los antropólogos podemos encontrar verdaderas joyas como Vacas, cerdos, guerras y brujas de Marvin Harris o El antropólogo inocente de Nigel Barley.


Sin embargo, y probablemente en relación con este carácter comercial, muy pocos científicos cargan con una cruz tan pesada como la que descansa sobre los hombros de los antropólogos. Entre sus filas, para desesperación de la gran mayoría de ellos, el número de embaucadores y charlatanes también es mucho mayor que en el resto de ciencias. A raíz de la desafortunada asociación de un importante número de antropólogos a los movimientos New Age, a la Contracultura y a corrientes sectarias como Conciencia III surgió la llamada Antropología de la Nueva Era. Este nefasto aumento de la pseudociencia entre los antropólogos tiene un comienzo muy claro: la publicación, en 1968, del bombazo editorial Las enseñanzas de Don Juan, escrito por Carlos Castaneda.




Don Juan, el indio hippie


La contracultura contribuye claramente a la consolidación o estabilización de las desigualdades contemporáneas merced a toda su inocencia alegre. Millones de jóvenes educados creen seriamente que la proposición de eliminar con besos al Estado corporativo como si fuera un “encantamiento maligno” es tan eficaz como cualquier otra forma de conciencia política

Marvin Harris, antropólogo


Carlos Castaneda tuvo una vida plagada de mentiras. Los periodistas del Times que investigaron su vida se encontraron con que todos los datos proporcionados por el antropólogo de moda eran falsos. Él afirmaba ser brasileño, sin embargo en su ficha de inmigración se puede comprobar que era peruano. Nació en 1925 no en 1935, no estudió en Milan sino en Lima y su padre no era profesor de literatura. Su ex-mujer, Margaret Runyon, cuenta en su libro My Husband Carlos Castaneda como éste desaparecía durante largos periodos de tiempo y la llamaba siempre desde cabinas telefónicas. Cada semana afirmaba tener un trabajo distinto y le solía regalar cajas con botellas de licor o vestidos carísimos sin explicar nunca de donde los sacaba.


Poco más sabemos de Castaneda, quien se preocupó siempre de mantener su pasado oculto. Nunca se dejaba grabar por las cámaras ni fotografiar y sus apariciones públicas eran escasas aun cuando sus libros se vendían a millones por todo el mundo. Sabemos que estudió antropología en la Universidad de California. Durante sus años de estudiante, según cuenta él mismo, conoció casualmente a Don Juan en una estación perdida de Arizona. Este extraño personaje resultó ser un poderoso chamán yaqui con impresionantes poderes. Castaneda decidió convertirse en aprendiz del hechicero y escribió años después sus vivencias en forma de libro. Presentó el libro como tesis en un máster de antropología y la editorial universitaria lo publicó con el título de Las enseñanzas de Don Juan.

El impacto del libro en plena efervescencia de los movimientos new age fue impresionante convirtiéndose en superventas al instante. Al igual que los siete u ocho más que Castaneda, ya multimillonario, escribió después continuando la narración de sus peripecias con Don Juan. Mientras todo hippie tenía el libro de Castaneda en su mesita de noche, los antropólogos normales se llevaban las manos a la cabeza ante la imagen de la antropología que el mentiroso confeso estaba ofreciendo al mundo.


¿De qué habla, exactamente Carlos Castaneda en su libro para causar esas reacciones contrarias? Las enseñanzas de Don Juan se asemeja más a un libro de hechizos que a un ensayo antropológico. Castaneda se sumerge por completo en la cultura estudiada, asumiendo como válidas todas sus premisas y ansiando aprender a realizar los hechizos del brujo. Juntos consumen yerba del diablo y peyote, se transforman en animales y vuelan grandes distancias en pocos segundos. Lo de que se transforman en animales y vuelan no es metáfora ni alucinación, realmente Carlos Castaneda afirma haber realizado esos prodigios.


Por no hablar de inexactitudes. Don Juan se parece a un indio yaqui lo que un huevo a una castaña y los rituales descritos por Castaneda tampoco se corresponden con los de este pueblo que ni siquiera usa el peyote. La opinión general entre los antropólogos es que Don Juan nunca existió y que los únicos viajes que Carlos hacía cuando afirmaba irse con su maestro eran a la biblioteca pública a rapiñar textos íntegros de otros autores que luego introducía en sus libros. Richard de Mille, el hijo del famoso director, publicó un libro en el que encontramos nada menos que 47 páginas llenas de citas de Don Juan acompañadas de la fuente de donde Castaneda las había copiado. Y, la verdad, no es que se esforzara mucho en documentarse ya que no llegó a conocer ni una palabra del idioma nativo de los indios yaqui: supuestamente había pasado años junto a un ancestral chamán y no sabía el nombre de ninguna planta o animal del desierto.


Para mayor desesperación de los auténticos interesados en la cultura yaqui y de los propios indios el enorme éxito de Las enseñanzas de Don Juan provocó auténticas oleadas de jóvenes que se adentraban durante los fines de semana en los territorios yaqui en busca de peyote y chamanes para poder convertirse en cuervos y volar sobre las montañas. Es de esperar que se sintieran desilusionados al comprobar que los yaqui no tenían peyote.


Los últimos libros de Castaneda son aun más místicos que los primeros y el autor se inventa una serie de movimientos copiados del kung fu y que según él son movimientos de poder aprendidos del viejo chamán, a pesar de que en los primeros libros no se hace mención de ellos. Llamó a esos movimientos tensegridad (tansegrity), copiando el nombre de un término usado en arquitectura, aunque solía referirse a ellos como pases mágicos. A pesar de que Castaneda los vendía como movimientos realizados por los indios nativos mesoamericanos, lo cierto es que los propios indios no tienen en su cultura nada ni remotamente parecido a la tansegridad. Esto no impidió que los libros del millonario Castaneda en los cuales describía esta técnica se vendieran como rosquillas. Incluso fundó una organización -o secta, en este caso son sinónimos- para difundir los pases mágicos llamada Cleargreen. Mediante Cleargreen, Castaneda se fue rodeando del grupo de acólitos obligatorios para cualquier gurú que se precie. Sus más fieles seguidoras eran un grupo de mujeres llamadas Las Brujas que desaparecieron cuando Castaneda murió de cáncer en 1998. Aunque su destino parece evidente si tenemos en cuenta, según algunos antiguos seguidores de Castaneda, que éste siempre hablaba de suicidio, al que se refería como El Salto y que ejercía un control absoluto sobre todos sus seguidores hasta el punto de que si querías unirte a ellos debías renunciar a discutir con él y estabas obligado a darle la razón en todo.


En 2002, Janice Emery, otra seguidora de Carlos se decidió a dar El Salto ella también. Se arrojó al vacío desde un cañón del Rio Grande.


Viendo la maraña de mentiras y el ambiente sectario y completamente enrarecido que rodeaba al antropólogo parece extraño el éxito millonario de Castaneda -incluso en la actualidad sus libros se siguen reeditando- y su influencia y popularidad entre un sector de los antropólogos, mínimo eso sí. ¿Cómo pudo llegar a tanta gente este gurú mentiroso confeso? A lo mejor, simplemente, Castaneda apareció en el momento oportuno.



La realidad ya no es lo que era


El relativismo, último refugio de la inseguridad moral y de los antropólogos

Nigel Barley, antropólogo


Finales de los sesenta. Vietnam, drogas, flores y contracultura. Este era el ambiente en el que apareció Las enseñanzas de Don Juan y además lo hizo en pleno centro del movimiento hippy, en California. No es extraño que se convirtiera en éxito de ventas al instante. Castaneda había sustituido a los típicos gurús de la contracultura, que solían venir del lejano oriente disfrazados de sabios budistas, por otro mucho más cercano, del desierto de Sónora, que postulaba los mismos principios ideológicos y que venía disfrazado de chamán indio (el envase es lo de menos) Por si esto fuera poco, este nuevo gurú al que seguir... ¡tomaba peyote!


Visto que Castaneda se limitó a copiar en su libro las bases de la contracultura, me limitaré las carencias de éstas y, por extensión, las de Las enseñanzas de Don Juan, basándome en los trabajos que el antropólogo Marvin Harris y el filósofo Martin Gardner han realizado sobre el tema.


En primer lugar, y por paradójico que parezca, la contracultura es movimiento que tiende a consolidar el poder establecido. Lejos de ser un movimiento afín a los grupos partidarios del cambio social como se suele pensar, es más bien una garantía para cualquier estado conservador. Esto es debido a sus métodos de actuación. El modo en que la contracultura pretendía -o pretende- cambiar el mundo es mediante un cambio de conciencia. Piensan que el mundo será mejor y el mundo será mejor, con eso basta. No hay que hacer nada más, tan sólo tener una actitud positiva. Don Juan insiste en animar a Castaneda a despreocuparse de los problemas mundanos; no le preocupan los niños hambrientos ni la situación precaria del pueblo yaqui, tan solo se centra en preparar su mente para las otras realidades. El cambio en la conciencia llevará a un cambio en la realidad. Cualquier gobierno se frotaría las manos al descubrir que los grupos que se le oponen piensan hacerlo no con movilizaciones ni con argumentos políticos, sino simplemente pensando bien y sonriendo.


Lo extraño de esto es que nadie se diera cuenta de que la Iglesia Católica ha venido intentando esto mismo durante los últimos dos milenios sin el más mínimo resultado. Cuando la realidad se empecinó en... pues en ser real, simplemente, con su Tierra girando alrededor del Sol, su evolución, en fin, sus cosas; entonces, hasta la Iglesia tuvo que admitir que tal vez iba ser mejor adaptar la conciencia a la realidad y no al contrario, al menos ante las mayores evidencias.

La contracultura no. La contracultura contraataca a estos argumentos agarrándose al relativismo más absurdo. El mismo que los antropólogos seguidores de Castaneda enarbolan para defenderlo en lugar de usarlo como herramienta de trabajo. Los descubrimientos científicos son considerados como cadenas, un modo de atarnos al mundo material, la realidad no es una sino muchas. Cada uno tiene su realidad. ¿Qué Castaneda dice que es capaz de convertirse en cuervo? Pues será capaz. A lo mejor tú no lo ves por que no estas preparado para acceder a ese otro mundo, pero en su realidad Castaneda era un cuervo.


Esta forma de pensar lo podemos encontrar ya en occidente hace siglos y puesta en práctica por gente que nada tenía de hippies. Era la regla que aplicaba la Inquisición. Cuando un antropólogo defendía a Castaneda alegando que lo importante era que él creyera que se transformaba en cuervo, no si se transformaba o no, estaba usando los mismos argumentos que la Santa Inquisición. Cuando las brujas se colocaban, con sustancias similares a las usadas por Don Juan y su pupilo, afirmaban haber sobrevolado pueblos y bosques. En el Malleus Malleficarum, libro de cabecera del buen inquisidor, los autores llegan a la conclusión de que es irrelevante si las brujas volaban realmente o solo lo hacían dentro de su cabeza. Si ellas creían que habían volado, era suficiente para condenarlas a la hoguera por brujería.


Este desprecio por las formas racionales de acceso al conocimiento, por la ciencia al fin y al cabo, no impedía a los seguidores de la contracultura pasearse en furgonetas con motor de explosión, poner a todo volumen sus equipos de música, ir al cine o llamar por teléfono. Tampoco impedía a los Antropólogos de la Nueva Era exigir ser considerados científicos -y sus argumentos tenidos en cuenta como tales- y, al mismo tiempo, negar los métodos de la ciencia por considerarlos insuficientes para tratar ciertos temas (pronunciese ciertos temas con tono misterioso) En Las enseñanzas de Don Juan nos encontramos con la misma paradoja: pese al desprecio inherente por la tecnología al considerarla un mecanismo del poder para perpetuarse, Don Juan es un tecnócrata de la peor calaña. Posee unos conocimientos secretos y tiene acceso a técnicas y habilidades negadas al resto de los mortales. Además usa este poder de un modo completamente egoísta, despreciando la situación de su pueblo y negándose a compartir su magia con los demás.

Poco importó que los antropólogos reales pusieran el grito en el cielo ante esta reducción al absurdo de una herramienta tan importante en su profesión como es el relativismo. Un antropólogo debe evitar juzgar a otras culturas en base a conocimientos o motivos morales de su propia cultura. Usado de este aséptico modo el relativismo se convierte en una herramienta imprescindible para acceder a un conocimiento objetivo de las costumbres ajenas. Es un modo de acercarse a la realidad. Usado fuera de este contexto, tal como hace la contracultura o los Antropólogos de la Nueva Era, pierde todo su sentido y se convierte en lo contrario, en una excusa para justificar cualquier creencia, postura o visión del mundo, por alejada que esté de la realidad. Este relativismo absurdo otorga la misma credibilidad a los conocimientos astronómicos establecidos por la ciencia que a la gente que sigue diciendo que la Tierra es plana. Todos tienen razón.


Resultaría interesante ver estas ideas aplicadas a la enseñanza, o a la justicia. Todos los testigos tendrían razón. Ya no habría quién, cómo o cuando; sino distintas versiones de los hechos todas igual de válidas. No habría diferencia entre victima o asesino, entre estafador o estafado.


Cuando los antropólogos reclamaron que se dejase de usar el relativismo para defender un libro completamente falso y fantasioso y exigieron a la Universidad de California que retirase a Castaneda el título de doctor, los responsables de la universidad manifestaron no tener motivos para hacer tal cosa. Al fin y al cabo, los libros de Castaneda editados por esa misma universidad se siguen vendiendo como rosquillas...


Refiriéndose a Castaneda, Kathryn Lindskoog escribió en su libro Imposturas, fraudes y otras fullerias: “Su única hechicería consistió en convertir a la Universidad de California en un asno



EPÍLOGO



Resulta difícil creer que algunos antropólogos todavía crean que Castaneda fue un investigador serio y competente de las asombrosas maravillas de los indios yaquis

Martin Gardner, filósofo y periodista



Los antropólogos contraculturales no sólo siguen existiendo sino que parece que aumentan. Por ejemplo, en Berkley se celebran congresos anuales de una asociación llamada Sociedad para la Antropología de la Conciencia. Estos son los extractos de algunas de sus conferencias:


Castaneda nos ha liberado del capitalismo, el comunismo, el consumismo, la racionalidad eclesiástica (¡!), el cientifismo fundamentalista marxista y su modalidad de elitismo, que condena al pueblo; y, por último, del nihilismo, la guerra eterna de venganza contra los pecados de muchas sociedades, que jamás se pueden perdonar. Gracias a Castaneda, se nos permite hablar con empatía, por ejemplo, sobre el sagrado personaje nigeriano Bori, sobre el gurú hindú, la mae de santo brasileña, Rumi, el oráculo tibetano, Jesús, el Bal Shem Tov, el Dalai Lama, Alce Negro y, por último, Don Juan.

Edith Turner, Universidad de Virginia

Ahí es nada.


La conciencia es esa parte de la conciencia de la que somos conscientes: Cómo los antiguos videntes y chamanes cortocicuitaron el cuerpo energético

Título de la conferencia de Roy Wagner, también de la Universidad de Virginia


Las enseñanzas de lingüística antropológica incluyen el conocimiento de la telepatía en la comunicación natural entre indígenas y el descubrimiento de idiomas humanos en su totalidad.

Dan Moonhawk Alford, Universidad Estatal de California


Las manifestaciones culturales de la conciencia humana son el resultado de los aspectos inmanentes y trascendentes de un principio de acción que surge de la tensión filosófica inherente en la naturaleza de la conciencia.

Ralph Allison de Los Osos, California.



Aunque estos cuatro ejemplos son suficientes para apreciar el daño que Castaneda ha causado a la antropología y para entender el resentimiento general hacía él y hacía su obra que manifiestan la mayor parte de antropólogos decentes, no podría acabar este artículo sin mencionar el último reportaje sobre Castaneda aparecido en el programa del misteriero (vendedor de misterio) Iker Jiménez. En el programa se presentaron los libros de Castaneda como trabajos científicos a la vez que dos invitados, un profesor de antropología y un psicólogo, dejaban patente que la contracultura no ha muerto ni mucho menos. El profesor afirmaba que, en clase, ponía a sus alumnos a buscar su Sitio de Poder en el aula. El psicólogo, por su parte, se tenía bien aprendidos los postulados contraculturales y afirmaba que no es posible un acercamiento científico a Castaneda pues nos habla de realidades distintas a la nuestra que solo se pueden alcanzar alterando la conciencia. Por supuesto, a pesar de esta negativa a usar el método científico, este señor fue presentados como científico por el conductor del programa.

La sombra de Don Juan es alargada.



BIBLIOGRAFIA

Castaneda, Carlos, Las enseñanzas de Don Juan, 1968

Gardner, Martin, ¿Tenían ombligo Adán y Eva?, 2000

Harris, Marvin, La cultura norteamericana contemporanea, 1981

Harris, Marvin, Vacas, cerdos, guerras y brujas, 1980

46 comentarios:

Anónimo dijo...

Soy uno de los componentes del blog AlicanteVivo y quiero felicitarte por tu esplendido blog, que descubrí hace tiempo y lo tengo entre mis favoritos.

arturo Moreno

Ramón dijo...

Muchas gracias.
Yo ahora mismo estoy leyendo varios artículos de Alicante Vivo que hasta ahora no había tenido tiempo de pasarme. Enhorabuena por vuestro trabajo, se ve una labor de documentación impresionante detrás.
¡Y felicidades por el premio! ;-)

MAIS CARGADA DE BOMBO dijo...

Yo soy estudiante de Antropología por la UNED, y me sorprendió mucho esta entrada, porque a pesar de estar terminando no tenía escuchado nada de este personaje. Lo cierto es que la historia de la antropología esta llena de páginas oscuras.
Además quería hacer otra recomendación: Bohanam, su etnografía sobre los Tiv, y en concreto un artículo que se titula "Shakespeare en la Selva", en la que cuenta las dificultades por traducir esta historia a los habitantes del poblado.

Anónimo dijo...

No conocía al tipo éste, pero sí sabía que los antropólogos tienen bastante mala suerte con los tarados entre sus filas. Un físico o un biólogo que se llamen tales y afirmen poder desafiar a la ley de la gravedad o curar el cáncer con plegarias son fáciles de contradecir. Un antropólogo es más difícil de rebatir: te toca ir al quinto carajo de donde dice que sacó sus investigaciones y conocer al pueblo en cuestión si quieres llevarle la contraria.

Pero lo que más me ha gustado de tu artículo, con diferencia, es esto:

En primer lugar, y por paradójico que parezca, la contracultura es movimiento que tiende a consolidar el poder establecido. Lejos de ser un movimiento afín a los grupos partidarios del cambio social como se suele pensar, es más bien una garantía para cualquier estado conservador. Esto es debido a sus métodos de actuación. El modo en que la contracultura pretendía -o pretende- cambiar el mundo es mediante un cambio de conciencia. Piensan que el mundo será mejor y el mundo será mejor, con eso basta. No hay que hacer nada más, tan sólo tener una actitud positiva. Don Juan insiste en animar a Castaneda a despreocuparse de los problemas mundanos
¡Coño, ya era hora! De verdad, leer esto ha sido como encontrar agua después de tres días en el desierto... Y nunca he estado tres días en el desierto, pero sí he estado en un desierto intelectual y moral y ético, y me repatean los higadillos los que piensan que el mundo va a cambiar sin que nadie curre para conseguirlo. Gracias por tu blog: he leído más artículos, como los de Feynman y el jardinero fiel de Stalin, pero éste es que ha sido aire fresco. Que gusto me ha dado leerlo.

Oye, ¿conoces un documental llamado Zeitgeist? Está teniendo un arrollador éxito en internet, y yo que soy una currita vulgaris, estoy intentando rebatirlo punto por punto. Es difícil, porque en algunos puntos dice verdades (sobre todo en la segunda parte). Pero en otros casos, es difícil rebatirlo porque apabulla con datos, y sobre todo para contrastar los datos de física y química que da, necesito desempolvar los libros de bachillerato y COU. Me preguntaba, ¿tienes intención de escribir algo de ése documental? Los vínculos están aquí:

http://video.google.es/videoplay?docid=8883910961351786332&q=zeitgeist+spanish&total=43&start=0&num=10&so=0&type=search&plindex=0
http://video.google.es/videoplay?docid=2141569373929310139&q=zeitgeist+spanish+2&total=9&start=0&num=10&so=0&type=search&plindex=0
http://video.google.es/videoplay?docid=8677758143839699527&q=zeitgeist+spanish+3&total=11&start=0&num=10&so=0&type=search&plindex=0

Lo siguiente es partiendo de la base de que te apetezca ver el documental, si no, puedes dejar de leer aquí mismo.
Yo ya he hecho un artículo exhaustivo contrastando la primera parte, y ya he detectado fallos históricos en la tercera. Pero si detectas alguno serio en la segunda, o mejor aún, si deseas hablar sobre ella tú mismo, te lo agradecería bastante. La segunda parte dice bastantes verdades, es en los datos científicos donde creo que meten la pata o exageran. Pero bueno, no sé si querrás comentarla o no, sólo quería saber qué te parece el documental.

Un saludo, y enhorabuena por tu blog,

Natsu

J dijo...

Felicitaciones por tan buen blog. Ya tienes un nuevo lector :)
Saludos

Ramón dijo...

Juan, no he leido el texto de Bohannan pero promete mucho. Lo he ecnontrado en pdf (http://www.ucm.es/info/reunidas/docreu/prog_reu/Programas%202c/ADANEZ/Texto%202.pdf) y lo leere en breve. Recuerdo algo parecido en "Una plaga de orugas" cuando llega el cine al poblado Dowayo. La interpretación que hacen sobre Tom y Jerry o sobre un video que trata los peligros de los mosquitos es muy interesante.

Natsufan, el vídeo ese tampoco lo conocia. Pero he leido tu análisis y en cuanto pueda veré el vídeo.

Anónimo dijo...

Dios que gusto da leerte Ramón!!!!
Un fan más. No te preocupes que seré tu mejor publicidad.
Un saludo

Anónimo dijo...

Changos, mi primer mensaje en este blog (que por aqui y allá vine a dar sin querer) y me salen con ésto!! Digo, no sé mucho de antropología, sólo me topé con el libro de Carlos en una de esas tardes de ocio, y lo he leido de pies a cabeza y me gustaba pensar en ese mundo de "fantasía" sin tomarmelo muy a pecho, pero hombre! no sabía todo esto... que me haz venido a taladrar la cabeza...

En fin, casi termino de devorar todos los temas de tu blog... muy bueno por cierto...

Saludos desde México...

Andrew Sanchezky dijo...

El que ha leido las obras de Castaneda desde un punto de vista estrictamente literario se da cuenta que en sus ultimas publicaciones ( muy especialmente de la que se dice "la ultima") no siguen su estilo y su prosa. No me extraña que con las peculiaridades del autor y el enorme peso del dinero de las editoriales, un "Castaneda clonado" haya recibido el encargo de continuar la saga. El famoso libro de tensegridad me recordaron los manuales de ejercicios de Jane Fonda. Comparese con la esencia de la primera obra. Ah!! y en lo personal, considero que los mejores libros de la mitologia Castanediana no son de el. Un par de autores franceses B. Dubant y M. Marguerie sacaron un par de libros ( en el tercero ya no escribe Marguerie) en donde analizan la obra de Castaneda vinculandola a las grandes tradiciones esotericas del planeta y a misticos como Ramana Maharshi, en español fue editada por Ediciones Indigo.

Taonadamente.

Anónimo dijo...

Yo fui una de las lectoras de este libro hace muchos años, por entonces tenia 18 y me gustaba todos estos temas, vivía la época hippy con retraso ya que eran los años de la transición democrática y me sentía hippy.

El libro "la enseñanzas de Don Juan" lo ley porque me el circulo de amistades en el que andaba nos gustaban los temas esotéricos, algunos de mis amigos se lo tomaron al pie de la letra el libro, pero yo me lo tome como un libro de aventuras y algo fantasioso.

Desconocía todo lo que cuentas de Carlos Castaneda, me parece alucinante, pero visto lo visto lo que me alucina más es la cantidad de gente que se cree todo lo que dicen los demás sin comprobar nada y se dedican a hacer de ese libro su forma de vida dejándolo todo.

Gracias por tu blog me ha gustado mucho, llegue a el a través de el blog de fogonazos.

Un saludo y animo todos los días me paso por tu blog para ver si has puesto algo nuevo

Anónimo dijo...

brutal!
me ha encantado tu artículo, tambien yo te meto en mis favoritos.
felicidades por tu blog.
maria

Anónimo dijo...

Para criticar a castaneda no hace falta con solo leer los libros hace falta conocer otras enseñanzas supèriores a castaneda ( a nivel espiritual) (el nivel intelectual siempre es limitado)y practicar las eneñanazas de las que habla Castaneda,

y despues podemos opinar, sino solo estamos dando opiniones sin fundamento, mas alla de la cultura del chisme.

Si estan contentillos con una enseñanza alejada de la experiencia propia, alla ustedes, trsite vida gris les espera.

Consulta todo con tu corazon, vive por experiencia propia.

Anónimo dijo...

eyTe puedo asegurar que Carlos fue un mentiroso, pero eso no le quita que te pueden enseñar mucho sus libros. Cuando uno alcanza cierto niveles de mago, puede mentir con fines didacticos.


El camino es personal, asi que lo que haya hecho o dejado de hacer castaneda, es cosa de el. La mayoría de los que lo critican, no lo comprenden, asi que sus criticas son solo berrinches de niño.

Los que superan a carlos castaneda si pueden criticarlo, pero me temo que son muy pocos.


Los antropologos son gente muy limitada, es imposible entender el mundo solo con que enseñana en las escuelas. Es encesario adentrarse a la verdad, a la sabiduria de los antiguos y activarla en uno.

Sin practica espiritual, terapia psicologica y un cuerpo sano es imposible acceder al conocimiento , por eso la mayoría de los antropologos son muy limitados.

Ramón dijo...

¿Cómo va eso de los niveles de mago, anónimo? A mi me suena a juego de rol pero me gustaría que te extendieras en ese punto, parece material de primera para un nuevo artículo. Castaneda debía ser un mago nivel 50, por lo menos, con +1 a Mentir y +5 en Engañabobos.

Y no, para criticar a Castaneda no hace falta alcanzar no se que niveles espirituales tántricos, ni entrar en armonía con la naturaleza, ni alcanzar una Conciencia Cósmica. Para criticar a Castaneda solo hace falta sentido común.

"Hay que tener la mente abierta. Pero no tanto como para que se te caiga el cerebro."
Richard Feynman, físico y viejo conocido de este blog.

paco. dijo...

me parece un buen articulo, excepto por el titulo sensacionalista, bastante "cristiano medieval" si se quiere, por el bajo contenido cientifico, sino puramene especulativo.

la antropologia es seria, por ende no da impresiones eticas, eso es paradojico en tu escrito.

Ramón dijo...

El título pretendía ser un juego de palabras con el título del libro de Nigel Barley "El antropólogo inocente".

En lo de bajo contenido científico no puedo estar más de acuerdo. Yo no soy científico, sólo cuento historias que me atraen por algún motivo (intentando ser lo más riguroso que puedo) y, a veces, doy mi opinión. Intento ser lo mas riguroso posible con los datos, y corrijo cualquier error que me hagais notar, pero no pretendo escribir artículos científicos ni nada remotamente parecido.

Y sí, también te doy la razón en que el título es sensacionalista, pretendo que lo sean todos los títulos (aunque no lo consiga a menudo ;P )

Pero me alegro mucho de que te parezca un buen artículo. ;)

Anónimo dijo...

Yo no botaría a la basura así nomás todo lo "místico", independiente de Castaneda.

Ramón dijo...

¿Qué entiendes por místico?
Si a lo que te refieres es al pensamiento New Age, que es lo que critico en este artículo, sí, creo que es superficial, vacio, pedantorro y, esencialmente, estúpido.

Si conoces alguna práctica o creencia New Age o contracultural digna de ser salvada de la basura, como tú dices, estaría sumamente interesado en conocerla. Yo, hasta ahora, no la he encontrado.

Hibris. dijo...

La antropología es todo un mundo, y como en todo mundo, existen fraudes.
Me ha gustado lo que has escrito acerca de la contracultura, muy acertado.
Enahorabuena por tu blog, me pasaré por aquí en más ocasiones.

Un saludo.

Hibris

DDAA dijo...

Coincido con la mayor parte del artículo y recomiendo una visita a Sustained Action, donde se desenmascara completamente al farsante que fue Castaneda.

No obstante, la idea de que la "contracultura" (término que detesto, dado que los representantes de la verdadera contracultura fueron los que bombardearon en secreto Laos y Camboya, entre otras mchas tropelías) animaba a la desmovilización es de un simplismo atroz. En el libro Sueños de Ácido se habla bastante de política y activismo y, de haber sido todo tan chupigyuay y New Age, no se entenderían algunas acciones del gobierno de EE UU. Como estas:

"The government did all it could to penetrate the New Left: use of informants and provocateurs was part of a massive campaign to subvert the forces of dissent in the late 1960s and early 1970s. The Federal Bureau of Investigation (FBI), the Internal Revenue Service (IRS), the Bureau of Narcotics and Dangerous Drugs (BNDD), the National Security Agency (NSA), the Federal Communications Commission (FCC), the Law Enforcement Assistance Administration (LEAA), the Department of Health, Education, and Welfare (HEW), the intelligence divisions of all the military forces, and numerous local police forces put over a quarter million Americans under active surveillance with dossiers kept on millions more. “Those affiliated with black militant, antiwar, and New Left groups were prime targets of dirty tricks and other underhanded tactics designed to stir up factionalism and ‘neutralize’ political activists.”(P 224)

Drug laws were used to arrest activists, including new ‘no-knock’ laws allowing police to break into the homes of suspected drug users. “in 1969 John Sinclair, leader of the White Panther party in Michigan, was sentenced to nine and a half years in prison for giving two marijuana joints to an undercover officer; Lee Otis Johnson, a black militant and antiwar organizer at Texas Southern University, was given a thirty-year jail term after sharing a joint with a narc; Mark Rudd, an SDS militant who played a prominent role in the uprising at Columbia University, was fingered for drugs by an informant; and police in Buffalo, New York, planted dope in a bookstore run by Martin Sostre, a black anarchist who served six years in prison before Amnesty International successfully interceded on his behalf.”(P 225-226)"

Anónimo dijo...

Lamentablemente, aqui no he visto a nadie todavia que se hubiera leido "las enseñanzas de Don Juan". Tampoco tu Ramon.
Porque si alguien lo hubiera leido, ese concretamente o los subsiguientes, sabria que no es un libro que haga defensa de la ciencia en favor de la espiritualidad, ni mucho menos, sino que es literatura, contada en primera persona, como pudiera ser un libro de detectives.
De hecho Castaneda en el primer libro es muy esceptico, pero le llama la curiosidad de esa espiritualidad que podría aprender.
Pero hasta el 4 o 5 libro castaneda no se hace llamar aprendiz, sino que es un extranjero viviendo una experiencia.
Lamentablemente, aqui tampoco veo a nadie que haya probado el Peyote ni el San Pedro, ni ninguno de los componentes que se toman en el libro para llegar al trance... Cuando lo probeis, hablamos, probablemente tengais una experiencia mucho mas interesante de la que imaginais, ya que el proceso esta a una línea del subconsciente y del estado consciente (y por eso Castaneda dice que se desplaza, etc).
Mientras tanto, ramon, no es por nada, pero este articulo no deja de ser un reportaje de "aqui hay tomate", con cotilleos sin importancia, y criticas de derechas a movimientos que mira tu que mas te dan.
La Revista Times hace este reportaje porque son lo que son, nunca he entendido a qué le temen los de derechas, de verdad.
Y que Castaneda ha hecho un daño a la antropología? dime por favor que otros antropologos, que no sean de derechas, claro, que opinen eso... porque mas alla de un movimiento espiritual como otro cualquiera no creo que haya tenido más incidencia.
Siempre comparas la inquisición y sus fundamentos, pues yo creo que los tuyos sí que se pueden comparar con la misma inquisición, en nombre de algo tan ambiguo (a pesar de muchos) como es la ciencia. Pero como dice uno de los anonimos, alla ustedes, triste vida gris les espera...

Anónimo dijo...

Pues resulta que el único lugar de Mexico donde crece el Peyote, es en el desierto de Sonora... Por favor, antes de decir verdades absolutas, hay que informarse bien!!! que luego la gente te lee y se hace ideas equivocadas...

Ramón dijo...

Anónimo, ¿tú conocimiento de que no he leído “Las enseñanzas de Don Juan” te ha sido revelado, lo has deducido por ciencia infusa o simplemente es lo primero que se te ha pasado por la cabeza?
He leído todos los libros de la “saga” Don Juan dos veces, la primera de adolescente por curiosidad y la segunda cuando estudiaba la carrera por recomendación de una profesora de Antropología bastante jipilonga que tenía. Además el primero de todos lo releí antes de escribir el artículo.

El que parece que no lo ha leído eres tú al hablar de él libro como ficción. No lo es. Es decir, claro que es mentira todo, pero esta escrito como si fuera cierto. Esos libros y lo que cuentan son la base del negocio y la secta que montó luego Castaneda. De hecho, el primero de ellos fue escrito para un master de antropología y el tercero fue su tesis doctoral. Así que no digas que Castaneda no pretendía hacer ciencia. O, mejor, vas y se lo dices a los de la Universidad de California, o a los profesores de antropología trasnochados que siguen recomendándolos.

Respecto al resto de tu mensaje, me parece un conjunto de tópicos vacíos y sin sentido.


Anónimo 2, ¿quién ha dicho que el peyote no crezca en el desierto de sonora? Lo que he dicho, y me reafirmo, es que los indios yaqui no usan el peyote en sus rituales ni forma parte de su cultura.

Ramón dijo...

Respecto a lo de equiparar criticar el movimiento New Age o la Contracultura con ser de derechas es lo más estúpido que he oído en mucho tiempo. No estoy muy comprometido politicamente pero si me tuviera que definir sin duda sería como alguien de izquierdas.
¿Por qué hay que identificar el pensamiento magico o la estupidez pseudocientifica con la izquierda? La asociación izquierda/New Age es una de las etiquetas que mas perjudica a las ideas progresistas. Puede que tú seas de izquierdas y te creas esas idioteces pero no generalices por favor. Algunos conservamos el cerebro aun.

Anónimo dijo...

Hola otra vez, Ramón.

Estoy escribiendo los dos últimos artículos sobre Zeitgeist, y no sé si sabes que el final del pseudodocumental recuerda bastante al movimiento hippy. Vamos, que parece que piensan que tooooodas las injusticias del mundo se van a acabar sólo con tomar conciencia de ellas (más quisiera yo). Tengo la firme creencia de que esa opinión es un peligro como una catedral, y pretendo contarlo en una de mis entradas. Pero como tú ya lo tienes escrito, te quería pedir permiso para sablearte los textos sobre contracultura que tienes aquí. Por supuesto, poniendo vínculo a tu blog, y dando tu nombre y tus apellidos si quieres... Pero te quiero pedir permiso, porque en este caso no quiero solamente poner un vínculo, quiero copiar el texto (y luego añadir de mi cosecha, claro está). Podría escribirlo yo desde cero, pero tú lo has redactado a la perfección, y francamente, con la de cosas que hay que rebatir por ahí, prefiero no tener que hacer lo que ya está bien hecho.

En fin, tú me dirás si puedo o no puedo. Si es que no, pondré un vínculo a tu entrada de todas formas, porque me encantó.

Un saludo,

Natsu

Ramón dijo...

Por supuesto que puedes usar todo el texto que quieras. Lo cierto es que no tengo el blog bajo ningún tipo de licencia, mientras se cite la procedencia no me molesta en absoluto que los artículos, o partes de ellos, sean reproducidos. Al contrario.

Ya me pasaré a leer ese último análisis de Zeitgeist cuando lo publiques.

Anónimo dijo...

¡Muchas gracias! Me queda otro artículo antes del último, y para el último me va a venir muy bien tu texto. Por supuesto, especificaré su procedencia y pondré en vínculo, como siempre.

Un saludo,

Natsu

Ja_ dijo...

Un bastante poco serio artículo para describir la obra de un personaje bastante poco serio para tí.
Ni siquiera escribes bien la palabra tensegridad (no tansegridad), que denomina a los movimientos, que en ningún momento Castaneda dijo que fueran practicados por los indios yaquis.

Anónimo dijo...

estar dispuesto a comprobarlo por si mismo y no quedarse unicamente en el analisis intelectual es la diferencia que determina el creer en algo. los cambios que se experimentan al practicar un conocimiento X sobre su vida privada circundante y sobre su misma persona son las pruebas que solo pueden servir a quien las llevo a cavo, SI QUIERES COMPROVARLO EXPERIMENTALO TU MISMO (que nadie te cuente).

Anónimo dijo...

Creo que Carlos Csataneda ha dicho lo suyo, creo que para destilar una opinión primero hay que leer su obra, la obra está hecha y eso es todo, si da que hablar que bien, si no qué más dá, deberíamos preocuparnos por los que fabrican, trafican y usan armas de fuego; asimismo, pensemos en los que creen que las drogas son un medio o un fin para lograr un propósito decente, creo que mejor será ver el mundo como algo interesante o misterioso, y si la poesía no les motiva, que más dá, el calentamiento globlal hará que nuestras relaciones humanas sean más calidas, pero no más humanas.....

Paola dijo...

Que mal artículo...lleno de críticas y sin conocimiento práctico ...en definitiva lo que se llama "mala leche"

Anónimo dijo...

Que fue antropólogo (Castaneda) y se doctoró es un hecho contrastable, que hizo muchos años trabajo de campo no ortodoxo también, que quedó "atrapado" en un conocimiento sin paralelo y se olvidó del camino lógico y positivista también. Que algo de sus enseñanzas (mejor, de las de sus inspiradores, concebidos en, sobre todo uno, de nombre Juan Matus que, por supuesto no era su nombre real también. Que era mentiroso y resbaladizo (no le quedaba otra), también. Que fué crítico y cuestionaba contínuamente el camino al que quería llevarlo Juan Matus, también. Solo hay que leer el tercer libro para comprobarlo (Viaje a Istlan), que lo de la tensigridad es una mezcla de cosas que aprendió con sus amigos chamanes y con otro instructor karateka (ahí ya se vendió un poco). Que hubo mucha envidia entre antropólogos mas ortodoxos y menos idem.
Que fue ególatra cuando denunciaba la importancia personal, también, pero que era mas humilde que el que escribe este artículo, seguro. Y que hizo hincapié entre "las enseñanzas" y una rama filosófica llamada fenomenología cuya cabeza visible fue Husserl, también.

Don Julio dijo...

El indecente es el que escribió el artículo plagado de inexactitudes. Como digo siempre, lo escribe (y lo suscriben) gentes que NUNCA han podido corroborar siquiera una de las propuestas del nagualismo tolteca. Fracasados, pues. Y vengativos. Porque el Nagual Carlitos les muestra la libertad a quienes se contentan "en la mierda calientita" como dijera Don Juan.
El Nagual Castaneda fue testigo, practicante y difusor de la "filosofía" conciencial y perceptual más avanzada de todos los tiempos. Trasciende (y lo digo porque yo he corroborado TODAS las propuestas castanédicas) a tantos y tantos "antropólogos" atrapados en la "estupidez cotidiana" como diría, otra vez, Don Juan.

Anónimo dijo...

Me encantan los libros de Castaneda. No me importa si es un mentiroso, como dice Don Juan ¿qué importa la mentira o la verdad?. A mi me han enseñado muchísimo esos libros. Por cierto, tanto dato y tanta ciencia, eso sí que me resulta estomagante.
Si todos los mentirosos son como él, me apunto a la mentira. La prosa que despliegas en tu blog, llena de datos al estilo wikipedia, me aburre a más no poder.
Gracias por hacerme comprender cuánto me gustan las enseñanzas del gran Don Juan.
¡VIVA LA MENTIRA!
Susana

Anónimo dijo...

Me encantan los libros de Castaneda y he aprendido mucho con ellos. No entiendo que manía con que es todo mentira. A mi me da igual si es o no mentira. Como dice Don Juan ¿qué más da la verdad o la mentira? Me gustaría saber si todos estos datos y este muermo prosaico al estilo wikipedia puede realmente ayudarme en algo. La respuesta es no. Todo mente e intelecto. Mucho corta y pega. ¿Cuál es tu verdad?
No hay nada como estos libros, son maravillosos. Pero claro, si no comprendes a dónde quería llegar con todo lo que escribió, es evidente que solo puedes dedicarte a indagar en si era un mentiroso, un farsante, un indecente...
Todos tus conocimientos no me hacen más feliz pero los libros de Castaneda sí.
Hale, a pasarlo bien.
Susana

Anónimo dijo...

Me encantan los libros de Castaneda y he aprendido mucho con ellos. No entiendo que manía con que es todo mentira. A mi me da igual si es o no mentira. Como dice Don Juan ¿qué más da la verdad o la mentira? Me gustaría saber si todos estos datos y este muermo prosaico al estilo wikipedia puede realmente ayudarme en algo. La respuesta es no. Todo mente e intelecto. Mucho corta y pega. ¿Cuál es tu verdad?
No hay nada como estos libros, son maravillosos. Pero claro, si no comprendes a dónde quería llegar con todo lo que escribió, es evidente que solo puedes dedicarte a indagar en si era un mentiroso, un farsante, un indecente...
Todos tus conocimientos no me hacen más feliz pero los libros de Castaneda sí.
Hale, a pasarlo bien.
Susana

Salicinus dijo...

El reportaje de Carlos Castaneda es el resumen de lo que ha sido la Brujería, desde sus orígenes hasta la actualidad, en la zona del mundo donde mayor y más efectivo, con diferencia, ha sido su desarrollo. Es asombroso e increíble, pero muy real.

Carlos Castaneda escribió 12 libros. Los cuatro primeros,

1-Las enseñanzas de don Juan.
2-Una realidad aparte.
3-El viaje a Ixtlán.
4-Relatos de poder.

son las enseñanzas para el lado derecho, el tonal. Se trata aquí de mostrar al tonal que su orden no es lo único que existe en el Universo, además de enseñarle impecabilidad.

Los dos siguientes,

-El segundo anillo de poder.
-El don del Águila.

son libros de transición en los que trata de sus relaciones con las personas del grupo del nuevo nagual, el suyo, y del grupo del antiguo nagual, don Juan. El primero resulta pesado y poco productivo, pero el segundo, de la mitad en adelante, es divertidísimo y muy instructivo.

Los siguientes tres libros,

5-El fuego interno.
6-El conocimiento silencioso.
7-El arte de ensoñar.

son las enseñanzas para el lado izquierdo, el nagual. Se trata de transmitir al aprendiz una idea del mundo acertada que le permita aprender a vivir en el caos. Estas enseñanzas se llevan a cabo en la conciencia acrecentada, que consiste en tener el punto de encaje ligeramente desplazado y móvil, tal como produce el cánnabis. Lo curioso de este estado es que no se recuerda cuando termina. Así, Carlos Castaneda tiene que hacer una tarea de rescate, de recordar lo que aconteció en la conciencia acrecentada, para escribir estos libros.

Por último está el libro,

8-El lado activo del infinito.

que es una reconsideración de todo el viaje, una recapitulación muy interesante y que aporta mucho nuevo. A destacar las relaciones de Carlos con el mundo cotidiano, el darse cuenta del desatino reinante en el Samsara.

Los libros

-La rueda del tiempo.
-Tensigridad.

son la aportación personal de Carlos y no valen nada. El primero es una recopilación de frases curiosas dichas por don Juan, pero están sacadas de contexto y ni si quiera son citas exactas, sino mal recordadas. Y el segundo es el intento de Carlos por crear una disciplina a partir de su conocimiento para ganar mucho dinero, que acabó en desastre.

Hacer notar aquí que Carlos Castaneda fracasó en su intento de llegar a ser un nagual, y su aportación al fenómeno fue, como don Juan le anunció, la de cerrar el segundo ciclo de la Brujería con broche de oro, de manera que pudiese surgir el tercero, cosa que hizo al reportar de modo impecable, abriendo la posibilidad a la obra
“Llegando al Paraíso”, en http://www.llegandoalparaiso.com

Los libros numerados del 1 al 8 son las enseñanzas directas de don Juan a Carlos. Son los que yo he leído una y otra vez, mientras investigaba otras obras, hasta descubrir la Verdad. Y seguí leyendo después para comprobar que lo que descubría era cierto.

Las brujas del segundo grupo de Carlos, Florinda Donner y Taisha Abelar, han escrito algunos libros, pero son muy flojos, no tienen la intensidad de los precedentes. En cualquier caso, aportan información sobre el fenómeno.

Espero que esta estructura básica ayude ala lectorx a comprender mejor y más rápido esta obra de poder fundamental.

Carlos Cerdán dijo...

Ramón: Anímate a iniciar una segunda temporada del blog. Mientras tanto he iniciado un segundo peregrinaje, de principio a fin.

Carlos Castañeda fue un paisano mio. Hace poco se publicó un artículo sobre él, visto por sus antiguos compañeros del colegio, que puede ser consultado en este enlace: http://utero.pe/2015/01/30/la-increible-historia-de-carlos-castaneda-el-cajamarquino-que-inquieto-la-cultura-norteamericana/

Saludos desde Cajamarca, Perú

Anónimo dijo...

he leido este articulo por casualidad, y he caminado por los comentarios.
elijo para mi opinion usar tu vocavulario y coincido con la palabra resentimiento.
creo que con la altura que intentas escribir, no hay dudas del resentemiento cultural que tenes. es tipico de ustedes, los que todo saben, despreciar las opiniones variadas buscando siempre hacer pie sobre el "sentido comun". y hago incapie en sentido comun porque definitivamente de antropologia no sabes nada, aunque creas saber todo. el sentido comun al cual te aferras esta determinado y manipulado por la cultura que te rodea, te moldea y te transforma. y eso no esta mal, lo que si esta mal es criticar otros puntos de vista basados en otra cultura. y en especial el de castaneda que es una mixtura entre culturas. porque aunque vos creas que un antropologo o cualquier profesional debe ser objetivo, debo comunicarte que la objetividad no existe, que todo es subjetivo, que todo varia de acuerdo a tu cultura. y el mejor ejemplo de esto es tu informe, que lejos esta de ser objetivo, de hecho esta cargado de odio y resentimiento que provienen de tu subjetividad.

en ningun momento intento defender a castaneda porque no tengo por que hacerlo.

pero creo que si la gente que opino, cree eso de castaneda, y a la cual no me opongo, deberia creer lo mismo de vos que pensas que te las sabes todas y creas tu propio circulo de poder que alimenta tu ego. usando verdades de otros autores queriendo disfrasarlas en una insulsa literatura.

saludos

no soy anonimo, me llamo joaquin

Oswaldo Antonio dijo...

Detienen a indígenas Yaquis en Nayarit con 198 kilos de peyote http://ireport.cnn.com/docs/DOC-976111

pyrobot dijo...

Este es un pésimo articulo que quien lo escribió parece que no leyó los libros que solo se los platicaron y mal, tan solo una muestra: Carlos Castaneda nunca adjudico este conocimiento a los indio yaquis como lo afirma aquí el autor (que quien sabe quien es el autor) ya que Carlos menciona que el grupo de don juan esta integrado por personas de diferentes etnias, razas, sociedades, y educaciones, este articulo es en su mayoría puras falacias fácilmente desmentidas con argumentos de la obra de Castaneda. Por favor mas seriedad para desmentir algo
háganlo seriamente y con método científico y sobre todo investigando de verdad, no sean mediocres, por ejemplo dicen que es un mentiroso confeso; bueno díganme cuando lo dijo? en que
fecha? donde esta el texto donde lo dice? o la grabación o el vídeo. porque yo también puedo inventar miles de cosas que pudo haber dicho.. por favor seamos serios, bajo estas circunstancias le doy mas credibilidad a los libros de Castaneda que a este pobre articulo de tres pesos.

Anónimo dijo...

Siempre he estado al margen de la ciencia, pienso porque ser cientifico aparenta un perfil de ser humano que a lo mejor nunca alcanzaréa pesar de que me esfuerzo. Estudié antropologia, soy descendiente de la cultura aymara, y vengo leyendo a castaneda desde hace 15 años, una y otra vez. En ese tiempo, he aprendido muchas cosas, como a ver la vida de una manera más consciente diría yo, no necesito probar peyote o cualquier otra sustancia para experimentar o ampliar mis niveles de percepción de la realidad en que vivo y de la gente a mi alrededo. Al contrario creo que mas responsabilidad con mis acciones, sensibilidad y capacidad de comprensión he adquirido, consciencia de una realidad muy dura, dificilmente aprendida por la ciencia que todo lo objetivisa y lo vuelve innatural, poco reconocible, poco inalcanzable.Espero en algun momento, poder entender qué de la ciencia que ustedes del otro lado del mundo profesan, me ayuda a mí y a mi gente a enfrentar la realidad y la vida que vivimos.

Anónimo dijo...

Castaneda es un cazabobos y tontos sin cerebro que quieren sentirse especiales y brujos està lleno. Por ahi arriba hay un sectario que se cree muy duro. Solo da palos de ciego porque es falso que haya experimentado todas las enseñanzas de castaneda. Miente igual que su maestro o el peyote le pega fuerte cada vez que lo usa.

Unknown dijo...

Es impresionante que a estas alturas, haya gente tan absurda y miope, que ante la imposibilidad personal de no comprender o si quiera concebir otras realidades mas allá del mundo cientifico, se dediquen a descalificar lo que evidentemente no entienden, tachandolo de falso o mentiroso....La literatura de castañeda, es otra cosa, no pretende la cientificidad, va mas allá de eso, además la realidad o realidades no se agotan en la ciencia clasicamente entendida, tal pretensión es de una positividad tan infantil como ingenua....hasta parece un poco cargada de envidia ante la imposibilidad fenoménica de idear, imaginar, ensoñar y otros fenómenos que trascienden lo canónico....

Unknown dijo...

saludos

Anónimo dijo...

Los tres primeros libros de Castaneda, publicados en inglés entre 1968 y 1973, intentan pasar por supuestos trabajos de campo etnográficos. Cualquier lector con una mínima formación universitaria se da cuenta que ninguno de ellos incluye referencias bibliográficas, ni siguiera para apoyar la metodología que el autor dice seguir. No sigue otra metodología que la narrativa, con alguna reflexión personal, pero no una auténtica discusión sobre las conclusiones a las que llega. discusión, en un trabajo académico, implica también la sistemática comparación con datos de fuentes bibliográficas ya publicadas, ya que un trabajo académico no se sitúa en el vacío, sino que su autor debe integrarlo y compararlo con otros estudios realizados sobre el tema. Si fuesen obras divulgativas, que es otro género posible, también echaríamos de menos las referencias (comparen con literatura divulgativa, por ejemplo Brian Greene en el campo de la física, y verán que hay abundantes referencias y apéndices con fórmulas matemáticas).

En lo que ser refiere al uso de lo que llama "plantas de poder" resulta llamativa la omisión de datos etno-botánicos. Si un antropólogo encuentra un informante que le enseña determinados usos de tales plantas, lo normal es presentar datos sobre las mismas contrastados con las fuentes abundantes que ya había en la época. Como no es un trabajo farmacológico, lo que se podría esperar es información sobre el uso que las plantas tienen en una cultura dada, su simbolismo, rituales de recolección, y los nombres locales que reciben (es rarísimo que Castaneda. No encontramos nada así.

Los datos omitidos no tienen nada que ver con preservar la confidencialidad y no revelar la identidad de los informantes, porque en un trabajo académico, citar obras publicadas y artículos especializados no infringe la confidencialidad.

Por supuesto que se puede hablar de realidades no catalogadas por la ciencia. Pero en ese caso, evidentemente, no se está hablando de ciencia ni se trata de un trabajo académico o científico.

La cuestión fundamental es que si los libros se hubiesen publicado como novelas nadie tendría nada que objetar. Por el éxito de ventas de la trilogía inicial tuvo que ver con el hecho de que se presentase como un trabajo de un antropólogo y más tarde doctor en antropología. Esas credenciales académicas le daban a los libros un aura de interés porque Castaneda parecía un científico heterodoxo. Si me refiero a la trilogía inicial es porque los libros posteriores ya corresponden a un género que no tiene nada que ver con la etnografía o la antropología.

Supongamos que efectivamente, los libros fuesen un relato de una iniciación esotérica en un sistema secreto. Bien, en ese caso ni cabe hablar de antropología ni de etnografía, sino del subgénero de literatura iniciática y de ocultismo al que pertenecen los libros dedicados a la teosofía, la magia y la New Age.